Rágol se caracteriza por la constatación del asentamiento cultural musulmán a lo largo de ocho siglos.

Durante el siglo IX se llevó a cabo una actividad colonizadora de unos 20 castillos con carácter defensivo en una zona conflictiva debido a sus pobladores, quienes no querían convertirse al Islam.

Posteriormente, en el siglo XIV, estando constituido el Reino de Granada, pertenecía a la Taha de Marchena, donde estaba la fortaleza principal y residía el gobernador.

Tras la rendición de Baza y las capitulaciones de Almería en 1490, Rágol deja de ser musulmana para comenzar su historia moderna bajo un nuevo poder político y religioso.

En 1494, por la ayuda prestada en la reconquista, se crea el Ducado de Maqueda, dando nombre a la comarca.

A lo largo del siglo XVI, se producirá una época de intensos cambios políticos, sociales y económicos, debido a las rebeliones de los moriscos, hasta el estallido final en 1568 y su derrota y expulsión en 1570.

Los siglos XVII y XVII serán de transición y recuperación de la crisis demográfica y económica, destacando la repoblación en 1574.

El siglo XIX se inicia con un ambiente liberal, consiguiendo la independencia jurídica y administrativa, además de la abolición de los señoríos en 1835, significando esto un crecimiento demográfico notable, y nuevas construcciones de carácter burgués, sobretodo en la parte baja del pueblo.

Esta situación continúa en las primeras décadas del siglo XX para su interrupción posterior, como consecuencia de una gran sequía y problemas sociales que enlazan con la Guerra Civil y una dura posguerra.

Actualmente, la sequía y despoblación son los principales problemas del pueblo y la comarca, por ello se están incorporando nuevas políticas comarcales y ayudas de la Unión Europea para emprender diferentes cultivos alternativos para paliar los problemas agrícolas del momento.

En cuanto a la gastronomía, destaca en los días lluviosos las migas con caldo de pimentón, pimientos, tomates secos fritos, pescado y tajadas. También se consumen los pucheros, cocinados en sus diferentes formas.

En los calurosos días de verano son refrescantes los gazpachos y ensaladas del tiempo. Además, son famosas las fritadas de conejo con pollo y las gachas con caldo de pescado.

Encontramos pues embutidos como morcilla, chorizo, longaniza, blanquillo y derivados del cerdo.

Como parte de la repostería típica navideña encontramos las tortas de chicharrones y manteca, el pan de aceite, los suspiros y los mantecados.

Típicamente se abandona la gastronomía basada en carne en cuaresma, dando uso a los vegetales que afloran en la vega, preparándose así los potajes de cuaresma con albóndigas y como postre los roscos fritos y buñuelos.

En los bordes del río sus cultivos florecen frente al pueblo siendo Rágol posiblemente elegido por sus fértiles tierras y por su cercanía al río.

Sus fiestas patronales acontecen entre el 17 y el 21 de agosto y son en honor a San Agapito.

Además, disfrutan las fiestas nacionales típicas como Semana Santa y Carnaval.

BARES RÁGOL


  • La Tahá Restaurante

ALOJAMIENTOS


  • Hotel Sol i Daria

ESTABLECIMIENTOS


  • El Pintao Viejo
  • Bodega de Serón